El ataque comenzó en la madrugada, cuando un combatiente de este movimiento islamista afiliado a la red terrorista Al Qaeda se inmoló en un puesto de control del Gobierno cerca de la entrada a Maalula, un pueblo de unos 2.000 habitantes, informa el diario 'The Washington Post' con referencia a la agencia de noticias AP.
Según el portavoz del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (SOHR), tras el atentado suicida, las fuerzas gubernamentales intercambiaron fuego con los rebeldes de Al Nusra, que finalmente se apoderaron del punto de control y de un hotel ubicado en una montaña desde donde se puede observar todo el pueblo.
Según los testimonios de los vecinos de la localidad y las monjas del monasterio local, desde el hotel los islamistas bombardearon el centro de Maalula utilizando lanzagranadas y ametralladoras pesadas.
Durante los combates los extremistas mataron a ocho soldados del Ejército de Al Assad y destruyeron dos tanques y un vehículo blindado.
Los militantes llevaron a cabo su ataque con gritos 'Dios es grande' y prometieron tomar el control del resto del pueblo muy pronto.
Maalula se considera un símbolo de la presencia cristiana en Siria, y hasta el momento no había sido atacado por los insurgentes. Los combatientes del Frente al Nusra, por su parte, no ocultan su intención de crear un emirato islámico en Siria en el que no haya representantes de otras religiones.
El mes pasado los rebeldes tomaron el control de la localidad de Al Thawrah y su presa, advirtiendo a los cristianos, que tuvieron que huir de la ciudad que, si querían volver, deberían "convertirse al islam" y que si no lo hacían serían asesinados.