En una entrevista para la revista religiosa 'The Independent Catholic News', el sacerdote español ha calificado de "gran error" los planes militares de EE.UU. en Oriente Medio y expresó su profunda compasión por el hecho de que Francia, "que ha hecho una contribución tan importante a la civilización y la cultura, hoy esté a punto de conducir a la humanidad hacia atrás, hacia la barbarie".
"Yo no tengo la costumbre de comentar la situación internacional. Pero en este caso nos encontramos ante una situación que va más allá de lo que puede justificar el silencio", explicó el jesuita.
"No entiendo quién les dio a EE.UU. y a Francia el derecho de actuar contra un país de una manera que sin duda aumentará el sufrimiento de una población que ya ha sufrido más de la cuenta", afirmó.
El prepósito está convencido de que actos de violencia como los que preparan EE.UU. y Francia solo se se pueden permitir en casos en los que estos supongan un castigo solamente para los culpables. Pero opina que esta estrategia es totalmente inaceptable si se utiliza contra todo un país.
Nicolás dijo que, a pesar del respeto que siente por EE.UU., solo puede calificar de abuso de poder su postura actual en Siria. "EE.UU. debe dejar de actuar como un 'hermano mayor' en el barrio del mundo. Esta posición conducirá inevitablemente al abuso, a la violencia y a una demostración de fuerza contra los miembros más débiles de la comunidad internacional", reflexionó el padre general.
Al ser preguntado por su opinión sobre el uso de armas químicas en Siria, el religioso expresó sus dudas sobre la teoría de que fueron aplicadas por el "régimen de Bashar al Assad". "No es suficiente que un miembro del Gobierno del país que desea atacar diga que está seguro de ello. Hay que demostrar que las cosas son tal como las dicen para que todo el mundo crea a este país. Sin embargo, hoy no tenemos esta confianza y ya existen numerosos argumentos acerca de cuáles son realmente los objetivos de EE.UU. en esta intervención", comentó.
Adolfo Nicolás está seguro de que un ataque militar contra Siria afectará principalmente a las personas inocentes de ese país, que ya han sido durante mucho tiempo las víctimas del conflicto.
"Todos sabemos que una de las principales preocupaciones de los sabios, de los fundadores de varias tradiciones religiosas, fue aliviar el sufrimiento humano", recordó el jesuita español. "Y ahora, en nombre de la justicia, planifican un ataque que solo va a aumentar el sufrimiento de las víctimas."
Al comentar la llamada del papa Francisco, que declaró el 7 de septiembre día de ayuno y oración por la paz en Siria, el máximo responsable de los jesuitas sostuvo que "apoyamos la acción del Santo Padre al cien por cien y deseamos desde el fondo de nuestro corazón que la anunciada acción punitiva no tenga lugar".
Para resumir su declaración Nicolás confesó: "A mí me resulta muy difícil aceptar que frente a una situación de conflicto un país que se considera cristiano no pueda encontrar otra respuesta que la acción militar, con la que puede llevar al mundo de nuevo a la ley de la jungla".