"El crimen principal es que estén presos por haber defendido la vida humana, por haber luchado contra el terrorismo, por haber protegido al pueblo cubano, y es un crimen que tras 15 años todavía continúen tras las rejas", señaló.
Asimismo indicó que las condiciones carcelarias han variado dependiendo de la situación. "Han utilizado el endurecimiento de las condiciones siempre que se ha presentado una apelación, durante el proceso del juicio que duró un poco más de dos años. […] Es un recurso que usan con bastante facilidad y cuando lo han hecho las condiciones han sido en algunas ocasiones peores que la de los presos de Guantánamo. […] También hay cierta dosis de violencia, no se puede negar que se corre cierto peligro", explicó.
"[Los otros cuatro cubanos] están presos por sus ideas políticas, porque el Gobierno norteamericano decidió dejar caer sobre ellos una venganza que han tratado de dejar caer sobre el pueblo cubano durante 50 años. Les molestó que los humilláramos durante el juicio, que sacáramos en cara sus mentiras, sus chantajes, y su apoyo a los terroristas que están haciendo daño al pueblo cubano", comentó.
Además subrayó que durante el juicio, todas las decisiones, a pesar de que hayan tenido un "ropaje legal", han sido decisiones políticas. "La ley ha sido modificada, amoldada, la evidencia ha sido seleccionada para satisfacer un fin político. Cuando EE.UU. tome la decisión política de resolver este caso, lo que tiene que hacer es decirles a sus jueces que apliquen la ley y en ese momento mis cuatro compañeros estarían de regreso", dijo.
"Este es un problema de costos y beneficios. Desde el momento en que el costo de mantenerlos en prisión es superior a los beneficios que obtienen con esta venganza tomarán la decisión política de liberarlos. Es importante la presión internacional, que se le haga saber al Ejecutivo norteamericano que el mundo los está mirando, que están pagando un precio por esto, que esa imagen que se quieren atribuir de guardianes del Estado de derecho es falsa", concluyó.