El presidente ruso, Vladímir Putin, ha dicho que Moscú saluda la declaración de Damasco de incorporarse a la Convención Internacional sobre la Prohibición de Armas Químicas. Insistió en que es un paso importante para arreglar la crisis siria. Putin reiteró la postura de Rusia, que considera inadmisible una intervención armada en Siria.
"La adhesión de Siria a la prohibición de las armas químicas confirma la seriedad de la intención de Damasco", subrayó.
La adhesión de Siria a la prohibición de las armas químicas confirma la seriedad de la intención de Damasco
Sobre el tema del programa nuclear de Irán, el presidente ruso dijo que Teherán tiene derecho al uso pacífico de la energía nuclear. "Creemos que Irán, como cualquier otro Estado, tiene el derecho al uso pacífico de la energía nuclear, incluido el enriquecimiento", dijo Putin.
La cumbre ha empezado con una reunión de los líderes de Rusia, China, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán, que han debatido los temas de actualidad de la cooperación en el marco de la OCS, así como la situación en la región y el mundo. A continuación, se ha celebrado una reunión ampliada con la participación de los países observadores y socios de diálogo, así como con miembros invitados de la ONU, la Comunidad de Estados Independientes (CEI), la Comunidad Económica Eurasiática (EurAsEC o CEEA) y la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
Se espera que el líder ruso mantenga reuniones separadas con el presidente anfitrión de la cumbre, el presidente de Kirguistán, Almazbek Atambayev, y sus homólogos de Afganistán, Hamid Karzai, e Irán, Hasán Rohaní. Los participantes de la cumbre tienen previsto firmar la Declaración de Biskek, que confirma el deseo de los miembros de la OCS de profundizar la cooperación socio-económica y humanitaria integral. Además se planea firmar varios acuerdos en las esferas de los recursos naturales, la agricultura y las nanotecnologías. Los temas claves de la cumbre son el programa nuclear de Irán y la crisis en Siria.