"Las Fuerzas Armadas rusas están listas para participar en el transporte y la destrucción de las armas químicas en Siria", dijo Shoigú.
Según publicó el periódico ruso 'Kommersant' con referencia a representantes del Estado Mayor del país, actualmente el Ministerio de Defensa de Rusia estudia la cantidad de soldados que podría enviar al país árabe. Se prevé que el contingente incluya especialistas en protección química, biológica y de radiación. Asimismo, el diario indica que una brigada de operaciones especiales también podría tomar parte en la operación.
'Kommersant' declara que el número total de tropas enviadas a la misión en Siria podría alcanzar 10.000. Los representantes del Estado Mayor entrevistados por el periódico señalaron que la cifra definitiva dependerá de la cantidad de personal que proporcionen los países socios.
Bajo el acuerdo alcanzado la semana pasada por Rusia y EE.UU. en Ginebra, Europa y EE.UU. también enviarán sus contingentes a Siria para contribuir a la operación del desarme químico.
El diario destaca que Rusia y EE.UU. disponen de unidades especiales de las tropas de protección química. Según fuentes diplomáticas de 'Kommersant', la posible participación de soldados europeos en la operación reducirá el riesgo de provocaciones por parte de la oposición siria.
La idea de enviar tropas rusas a Siria para participar en las operaciones de retirada y destrucción de las armas químicas fue anunciada por primera vez por el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, después de la reunión del martes con su homólogo francés, Laurent Fabius. El canciller ruso sostuvo que los lugares de almacenamiento de armas químicas en Siria requieren "cierta presencia internacional" y medidas adicionales de seguridad.
El presidente sirio, Bashar al Assad, declaró el miércoles que el país árabe está dispuesto a destruir sus armas químicas y "listo para entregarlas al país que las pueda aceptar”. El mandatario de Siria agregó que "la destrucción de las armas químicas costará 1.000 millones de dólares". Se espera que Damasco se deshaga de los productos químicos antes de 2014.