"La reunión con el secretario de Estado, Kerry, se dedicó a muchos problemas, el principal de ellos, el de Siria. Sobre todo, se abordó el tema de la preparación de las decisiones del Consejo Ejecutivo de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) y una resolución del Consejo de Seguridad en apoyo de esta decisión sobre las medidas que deben tomarse para eliminar las armas químicas en Siria", resaltó Lavrov tras reunirse con John Kerry.
"Tanto la parte rusa como la estadounidense acentuamos que es necesario hablar de la destrucción de todas las armas químicas que se encuentran en Siria, porque hay serias preocupaciones de que una parte de los componentes peligrosos los tenga la oposición", subrayó el diplomático ruso.
"Nuestras conversaciones fueron productivas, tenemos una comprensión común de cómo seguir adelante y hacerlo con la base del acuerdo alcanzado en Ginebra", dijo el jefe de la Cancillería rusa.
"Hemos confirmado la validez de los enfoques que están establecidos en ese acuerdo. Estos enfoques fueron respaldados por la abrumadora mayoría de los países de la ONU. Espero que podamos acordar la resolución del Consejo de Seguridad sin salir más allá del acuerdo de Ginebra. La resolución será aprobada en cuanto los miembros del Consejo Ejecutivo de la OPAQ voten por su decisión. La OPAQ desempeña un papel importante en esta cuestión", explicó Lavrov.