Mientras el mundo se recupera del 'shock' tras la masacre en el centro comercial Westgate en Nairobi, van apareciendo conmovedoras historias de algunos de los protagonistas, como el niño británico Elliot Prior, que a sus 4 años desafió a uno de los terroristas.
Elliot, junto a su hermana Amelie de 6 años, acompañaban a su madre Amber al supermercado para hacer compras cuando inesperadamente se vieron en el epicentro del tiroteo. Los tres lograron esconderse detrás de un mostrador, pero la madre de 35 años fue herida en la pierna. Al verlo el niño se dirigió a uno de los agresores y le dijo que era "un hombre muy malo". Increíblemente el hombre armado se compadeció del niño y de su hermana, les dio unas barritas de chocolate y les permitió abandonar el centro comercial junto a su madre, pero antes le pidió perdón y le dijo al niño: "No somos monstruos".
En la trágica masacre en Nairobi perdieron la vida 62 personas y resultaron heridas unas 200. El grupo terrorista Al Shabaab, vinculado a Al Qaeda, tomó el centro comercial el sábado por la tarde y retuvo como rehenes a sus visitantes, la mayoría de los cuales fueron liberados la noche del domingo.