Rusia tiene datos de que el gas sarín usado cerca de Damasco era artesanal

Moscú tiene información de que el gas sarín utilizado el 21 de agosto cerca de Damasco era de fabricación casera, según ha declarado el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
"En relación con el incidente en Alepo el 19 de marzo, cuando la ONU, bajo la presión de algunos miembros del Consejo de Seguridad, no respondió a una solicitud del Gobierno sirio de enviar inspectores para llevar a cabo una investigación, Rusia llevó a cabo su propia investigación por petición del Gobierno sirio y sus resultados están al alcance del Consejo de Seguridad y el público", dijo Lavrov en una entrevista con el diario 'Washington Post'.

Según el ministro, "la principal conclusión de aquella investigación fue que el sarín usado era artesanal, y también tenemos pruebas de que el 21 de agosto se utilizó el mismo sarín, pero con una concentración más alta". 

El canciller ruso, Serguéi Lavrov, dijo que entregó al secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, las pruebas de la participación de la oposición siria en la agresión química del 21 de agosto en un suburbio de Damasco. Según Lavrov, "hay muy buenas evidencias que demuestran" que los insurgentes participaron en el ataque químico.

"Yo solo presenté una compilación de evidencias a John Kerry cuando nos encontramos por un par de horas [en Nueva York]. Estos datos no son nada revolucionarios. Están disponibles en internet", dijo.

Lavrov recordó que en Ginebra se puso de acuerdo con John Kerry en que tomarían "muy en serio" cualquier "violación de las obligaciones derivadas de la Convención sobre Armas Químicas", así como "cualquier uso de armas químicas por cualquier persona en Siria", cuestiones que -dijo- "serían llevadas al Consejo de Seguridad bajo el Capítulo VII".   

Sobre la proliferación del extremismo más allá de las fronteras de Siria, Lavrov reiteró que los yihadistas de muchos países como Rusia o Estados Unidos están luchando en las filas de los grupos extremistas. "Estoy seguro de que están ganando experiencia que van a tratar de usar después de la crisis siria y, en primer lugar, en sus países de origen", destacó el canciller ruso subrayando que se trata de "una amenaza común".
 
Lavrov recordó que uno de los focos de proliferación del extremismo es Libia, cuyos combatientes están ahora dispersos "en docenas de países", sobre todo  en África. "Las armas libias están siendo enviadas a estos países para apoyar el movimiento extremista", dijo el ministro.   

El pasado 19 de marzo al menos 25 personas murieron en la provincia de Alepo por un ataque con armas químicas. Para investigar aquel trágico episodio de la guerra en Siria al país llegó un grupo de expertos de la ONU. Poco después de su llegada, el 21 de agosto, se produjo el supuesto ataque en las afueras de Damasco que motivó los posteriores planes de una intervención militar de EE.UU. y sus aliados.     

El Consejo de Seguridad de la ONU trabaja para acordar una resolución sobre Siria.  El miércoles los cancilleres de los cinco países permanentes del organismo mantenían una reunión para tratar el tema sirio.