El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Actualidad

Mujeres policía: el mismo riesgo sobre tacones

Publicado:
La formación matutina de la guardia de patrulla policial de la ciudad rusa de Astrakhan es todo un espectáculo para los policías comunes y una frustración para los oficiales. A diario la recientemente formada compañía de mujeres policía enfrenta la difícil tarea de llegar a tiempo a la formación

La formación matutina de la guardia de patrulla policial de la ciudad rusa de Astrakhan es todo un espectáculo para los policías comunes y una frustración para los oficiales. A diario la recientemente formada compañía de mujeres policía enfrenta la difícil tarea de llegar a tiempo a la formación con calzado de tacón. Por un lado, son mujeres para quienes el maquillaje y los tacones son cosas imprescindibles. Por otro, vigilan el orden público al igual que los hombres.

Uno no tiene que prestar atención a la trenza que sale por debajo del gorro. La pistola y el bastón son auténticos y se les suma un sincero entusiasmo para neutralizar a los bandidos que, por cierto, nunca oponen demasiada resistencia.

El policía Serguéi Avdeev afirma que "en la policía tiene que haber algo bonito. A una chica guapa que lleva uniforme nadie la acusaría de ser corrupta".

La jefatura policial es consciente de que, aún con un bastón y una pistola en las manos, la mujer no causa la misma impresión a un robusto delincuente que un hombre. Por eso las patrullas femeninas son más una atracción exótica que cumple su servicio en los barrios más tranquilos de la ciudad, aumentando el prestigio del servicio policial a ojos de los ciudadanos.

La inspectora Anna Oníshenko está especializada en los barrios más marginales. Dice que a las filas policiales la llevó el más puro altruismo. Al cabo de un mes ya conocía en persona a todos los 'sin techo' del barrio. "¿Cuándo te has afeitado? ¿Con qué te has afeitado, con una cuchilla? Te has afeitado mal… pero bueno… vale", le dice a un hombre sin hogar. Le da pena llevar al pobre vagabundo de la mano a la comisaría. Una vez más, Ana le da una charla educativa. Al caer la noche la esperan las aventuras. A sus 22 años Ana ha aprendido incluso a escalar por las tuberías de calefacción… y a tranquilizar a los que han bebido demasiado alcohol.

La jefatura de la policía cuida de sus subordinadas. Las jóvenes patrullan la ciudad en compañía de sus amigos.

"!Dereeeee- cha! ¡Descansen! He hecho la pausa a propósito, chicas, a la derecha!", grita el comandante. La marcha es la disciplina más difícil para las hermosas guardias. No es algo propio de ellas desfilar… y los tacones no son el complemento más adecuado para mantener la formación.

RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7