Según 'Financial Times', el conglomerado multinacional estadounidense United Technologies ha anunciado sus planes de despedir, al menos, a 4.000 empleados durante esta semana, mientras que otros 1.000 se irían si el problema no se resuelve el mes que viene.
Con la suspensión parcial de trabajo, se reducirá significativamente la capacidad de la inteligencia para detectar las amenazas
Además, según la publicación, otros 2.000 trabajadores de Pratt & Whitney, productor de motores para la aviación militar y civil, se verán obligados a regresar a casa durante esta semana si la situación no cambia. La corporación Boeing, que de momento se ha visto menos afectada que otras empresas, declara que "sigue los acontecimientos de cerca".
Según el experto independiente en la seguridad nacional de EE.UU. Loren Thompson, cuanto más se demore el Gobierno de EE.UU. con la aprobación del presupuesto, más empeorará el sistema que asegura la defensa nacional. "Se cerrarán las plantas, se pararán los trabajos de reparación al terminarse los contratos", dijo.
También se habla mucho sobre las consecuencias globales de la demora del Gobierno en solucionar las crisis. "Escuadrillas enteras de aviones caza están en el suelo. Miles de empleados de la inteligencia de EE.UU. juegan en casa en Minecraft. El cierre de las instituciones estatales está empezando a tener un impacto real en la infraestructura de defensa e inteligencia de EE.UU.", escribe 'Foreign Policy'.
En particular, la NSA (la Agencia Nacional de Seguridad) se vio obligada a enviar de vacaciones sin remuneración a más de 4.000 informáticos y más de 1.000 matemáticos.
Según los autores del artículo, en el Pentágono el personal que ayudó al secretario de Defensa, Chuck Hagel, y a otros funcionarios de alto nivel a formular una doctrina militar de EE.UU. en relación con países como Egipto, Siria, Irán e Israel descubrió que "no son una de las prioridades".
"El comando Aéreo de Combate no permite el vuelo a los escuadrones que está previsto lanzar en el extranjero a partir de enero del nuevo año", dice la publicación. Según los expertos, atacar a EE.UU.en estas condiciones sería más fácil.
"Con la suspensión parcial del trabajo, se reducirá significativamente la capacidad de la inteligencia para detectar las amenazas y proporcionar información necesaria para tomar un número significativo de decisiones en materia de seguridad nacional", resume Shawn Turner, portavoz de la Dirección de Inteligencia Nacional.
"Esta situación podría tener un impacto negativo significativo en nuestras relaciones internacionales. Surge la pregunta: ¿es posible confiar en EE.UU. como socio confiable que va a cumplir sus promesas en relación con sus aliados?", pregunta retóricamente, a su vez, el jefe del Pentágono, Chuck Hagel.