Foto: Snowden se reúne en Moscú con denunciantes de actos de la CIA, NSA y FBI

Cuatro denunciantes estadounidenses que presentaron la candidatura de Edward Snowden para el premio Sam Adams han llegado a Moscú y han visitado los estudios de RT.

 Snowden se reúne en Moscú con denunciantes de actos de la CIA, NSA y FBI.
 
Jesselyn Radack (reveladora de datos sobre la actividad ilegal del FBI), Thomas Drake (exinformante sobre la actividad de la NSA), Coleen Rowley (que filtró información sobre el FBI) y Ray McGovern (exinformante de la actividad de la CIA) mantuvieron una reunión secreta en Moscú con el prófugo exagente de la CIA Edward Snowden, autor de las filtraciones sobre el programa secreto estadounidense de vigilancia mundial y que actualmente se encuentra asilado en Rusia. 

"Está muy bien, muy concentrado; sigue siendo muy inteligente y alegre", comentó Jesselyn Radack sobre Snowden. Los activistas subrayaron que Edward no experimenta ningún problema psicológico. "Está convencido de que lo que hizo fue lo correcto. Está tranquilo y quiere saber qué le depara el destino", subrayó Ray McGovern. 

Los denunciantes subrayaron que no se arrepienten de sus filtraciones. Thomas Drake -que filtró datos sobre la violencia y abusos masivos ejercidos por la NSA- reveló que pagó un precio muy alto por sus actos. Su familia y sus amigos recibieron amenazas. "Tengo suerte de ser libre. Pero es el precio que siempre se paga por estas cosas", dijo. 
 
"He notado que cuanto más secreto quiere permanecer EE.UU., más se desarrolla nuestra sociedad civil, más gente aparece que solo quiere hacer su trabajo y decir la verdad", dijo Jesselyn Radack, agregando que las personas que se atreven a revelar la verdad al final acaban perseguidas. "Hubo una investigación criminal contra mí, me prohibieron salir del país, se me aplicaron las medidas más draconianas. Nunca pude imaginar que el presidente Obama perseguiría a personas como Thomas Drake, Edward Snowden, Bradley Manning y muchas otras por 'actos de espionaje', la acusación más grave posible contra un estadounidense", comentó Jesselyn Radack, quien, mientras trabajaba como consejera ética del Departamento de Justicia, hizo público que después de los ataques del 11S el FBI interrogó a John Walker Lindh (conocido como el 'talibán americano') sin que hubiera un abogado presente.

 

Los activistas han abordado también las declaraciones de Andrew Parker, el nuevo director del MI5, que utilizó su primer discurso para lanzar un ataque mordaz contra los denunciantes, advirtiendo que "han regalado" a los terroristas la capacidad de atacar "cuando quieran".

"La gente, obviamente, es leal a la integridad. La integridad debe prevalecer ante este tipo de lealtad ciega. Casi no hay pruebas que demuestren que filtrar información perjudique la seguridad. Precisamente lo que es perjudicial es que la información no se comparta con los ciudadanos. Por esta misma razón se produjo el 11-S, todo el mundo lo ha olvidado", comentó respecto a este tema Coleen Rowley, que reveló fallas intencionadas del FBI. 

Ray McGovern, exoficial del Ejército de EE.UU. y veterano analista de la CIA retirado, tachó las palabras de Parker de "declaración política que exagera el peligro para fines políticos".