La unidad táctica básica en la nueva táctica será un pequeña patrulla de F- 22 que atacaría desde una dirección inesperada, informan fuentes del Pentágono citadas por el portal especializado en defensa janes.com.
Se prevé mantener las patrullas de F-22 en el aire durante ciclos de 72 horas que incluyen un ataque, un rápido repostaje de combustible en vuelo y un redespliegue.
El concepto contrasta con las formaciones de combate tradicionales, que implican grandes agrupaciones de aviones que actúan desde pocas bases aéreas.
La ventaja del nuevo método sería un aumento del factor sorpresa, flexibilidad táctica y ritmo del combate. Al mismo tiempo, los expertos militares creen que la nueva táctica facilitará la solución del problema de suministro, ya que no requiere el desplegue previo de escuadrones de combate y unidades de mantenimiento en una base aérea.
La nueva unidad táctica consistirá en 4 cazas F-22, un avión de transporte militar C- 17 Globemaster III y un personal especialmente capacitado para la ejecución de las tareas mencionadas.