El portaaviones Nimitz y dos destructores abandonarán el mar Mediterráneo en las próximas semanas para volver a sus respectivas bases, en los estados de Washington y Virginia. La presencia naval norteamericana en las costas sirias quedará reducida a solo tres buques de guerra: los destructores Monterey, Stout y Ramage.
En cuanto a la iniciativa de la Armada estadounidense, la escritora y analista dijo a RT que "EE.UU. la verdad es que de Siria no ha salido triunfante de ninguna de las formas y de ninguna de las maneras".
Al mismo tiempo opinó que la retirada de solo una parte de la enorme agrupación naval congregada cerca de las costas sirias significa que "EE.UU. no puede reconocer que ha fracasado". Además, Dellavernia sugirió que "probablemente lo que haga EE.UU. sea dar una vuelta hacia otro punto, quizá por la zona de Sudán", dijo.