EE.UU. se lava las manos en el ciberataque al Elíseo de 2012 y sugiere que pudo ser Israel

EE.UU. ha presentado a Francia argumentos para justificar que no participó en una operación de espionaje del Elíseo descubierta en mayo de 2012 y hace alusión a una posible implicación de Israel, uno de sus principales aliados en Oriente Medio.
Estas revelaciones, que beben de las filtraciones del extécnico de la NSA Edward Snowden, las recoge un artículo del diario francés 'Le Monde', en el que ha colaborado el experiodista del diario británico 'The Guardian' Glenn Greenwald, el principal cooperador de Snowden. 
 
Una nota interna de la NSA preparada para la visita del pasado 12 de abril de dos altos cargos franceses de los servicios de información a Washington en relación con el ciberataque al Elíseo en 2012, concluye que ninguna de las agencias de EE.UU. (incluida la CIA) ni de sus principales socios en ese terreno (Reino Unido y Canadá) montaron ese sistema de interceptación de información en el Elíseo.
 
"TAO [unidad de la NSA] confirmó que eso no fue una operación de TAO. [...] TAO no preguntó si el Mossad o ISNU estaban involucrados, ya que Francia no es un objetivo aprobado para la discusión conjunta de Israel y Estados Unidos", reza la nota clasificada.    
   
"La NSA no dice que el Mossad llevó a cabo el ataque, pero, sin embargo, considera necesario mencionar la existencia de una duda razonable en cuanto al Estado judío", concluyen los autores del artículo.