Según el experto los esfuerzos de Israel para minar las negociaciones entre la oposición y el Gobierno sirio en Ginebra han fracasado, por eso Israel se ha visto obligado a inventar algo nuevo. "Creo que esto es claramente un intento de sabotear las negociaciones que podrían tener lugar en breve", dijo Petras.
La política israelí es gobernar o destruirExplica que esta no es la única causa del presunto ataque en Latakia, ya que tuvo "múltiples propósitos".
"Uno de ellos es distraer la atención de la construcción de 1.500 nuevas viviendas en Jerusalén Este. Creo que es una manera de señalar su superioridad en la región, y creo que es una manera de socavar la resistencia de Siria a la oposición", sostiene el experto.
"La política de Israel es destruir a cualquier adversario de sus apropiaciones de tierras en Palestina, y Siria es sin duda un aliado de los palestinos. Ellos apoyan la autodeterminación palestina. Y Siria es también un aliado de Irán. Así que la política israelí es gobernar o destruir", afirmó Petras.
Según el exanalista del Senado, Israel está apoyando a la oposición siria, no porque espera que sea mejor, "sino debido a que el apoyo continuo a la oposición destruirá la economía de Siria, socavará su sociedad civil y cualquier modus vivendi".
Además, el presunto ataque israelí contra esta base podría ser un precedente para un posible ataque contra Irán "para impulsar una legislación que estrangule la economía iraní mientras se realizan las negociaciones de paz 5+1", supone Petras.
Mientras tanto, las fuerzas de inteligencia de Siria desmintieron la información sobre el ataque a su base aérea en Latakia, en la costa mediterránea del país. "Esto es una mentira y una provocación", dijo una fuente de las fuerzas de inteligencia a la agencia rusa Itar-Tass.