El presidente de la Generalitat Valenciana se pronunció este miércoles sobre el cierre de Canal 9 para asegurar que el gobierno valenciano "no cerrará un colegio o un hospital por tener una televisión autonómica" que es, dijo, "inasumible".
"Es una decisión nada fácil. Soy consciente de lo que representa Canal 9 para los valencianos. En estos tiempos todo el mundo ha tenido que renunciar a algo. Pero no puedo decir a un ciudadano que voy a tener que cerrar un colegio o un hospital mientras mantengo una televisión con 40 millones de euros", dijo Alberto Fabra.
El cierre de la cadena de televisión provocará el despido de más de 1.500 empleados, que han denunciado la mala gestión política y económica de la corporación.
Los trabajadores también han expresado su indignación: rodeada de compañeros, la presentadora del informativo anunció el fin de las emisiones y leyó un comunicado de los trabajadores. Asimismo, muchos trabajadores se manifestaron frente a la sede del gobierno autonómico.
Decenas de trabajadores y extrabajadores de RTVV se concentraron a las puertas del Palau de la Generalitat. Muchos de ellos portaban pancartas donde se podía leer: "Los trabajadores no somos los culpables. Ahora exigimos una televisión pública, en valenciano y de calidad". "Queremos diálogo y negociación porque no lo ha habido en todo este tiempo", reclamó la presidenta del comité de empresa, Salut Alcover.