Petróleo e instalación de bases militares, principales intereses de EE.UU. en Venezuela

"Ganar una pequeña guerra" en Venezuela permitiría a Obama incrementar su peso político, devolvería a Washington el dominio en el sector energético y proporcionaría a EE.UU. nuevo terreno para bases militares, opina el columnista ruso Nil Nikándrov.
"Lo que está pasando en Venezuela hoy en día recuerda mucho el escenario de 1973 en Chile: primero, debilitar, luego, comprometer y, finalmente, derrocar", asegura Nikándrov. Según él, la causa es muy simple: la imagen de Barack Obama tanto en casa como en el extranjero está "catastróficamente deteriorada", lo que le obliga a buscar todo tipo de "alternativas de emergencia" para restaurarla. Vencer a "un régimen casi marxista" en Venezuela sería la solución ideal. Le proporcionaría influencia política y le permitiría controlar las riquezas petroleras más importantes del mundo.

Sin embargo, estas no son las únicas razones. El plan estratégico de EE.UU. en Venezuela elaborado por la CIA y la Agencia de Inteligencia de la Defensa, entre otros servicios, prevé una desestabilización completa del país, incluyendo enfrentamientos sangrientos entre la oposición y las fuerzas del orden. Una vez se haya desarrollado esta situación, Washington la aprovechará como pretexto para trasladar sus bases militares a Venezuela desde Colombia, insiste el analista.

Las autoridades estadounidenses no parecen estar contentas con las negociaciones de paz entre el Gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC, asegura Nikándrov. El cese del conflicto armado que sacude Colombia desde hace más de medio siglo pone en peligro la permanencia de las bases militares estadounidenses en el territorio del país latinoamericano, por lo que Washington está buscando alternativas. Y Venezuela podría ser una de ellas. No es casualidad que, en el marco de misiones diplomáticas, EE.UU. esté enviando a Venezuela a especialistas que cuentan con una exitosa trayectoria en Irak, Afganistán y Libia. Además, son cada vez más frecuentes los casos de detenciones de periodistas estadounidenses que trabajan en las inmediaciones de objetos militares -aeropuertos, puertos, centros de control y radares- en territorio venezolano, denuncia el analista ruso.

Según el Gobierno de Venezuela, se trata de una guerra silenciosa que busca crear el caos social. "Venezuela está en la mira de la desestabilización. Se trata de una guerra sin rostros, sin responsables, y tiene como objetivo derribar el Estado y crear el caos social", declara el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.