"Matar a todos en China", respondió el niño de 6 años. El conductor del programa remarcó que esa era "una idea interesante" y continuó sin más, apunta el portal Gawker.
Sin embargo, el comentario ha provocado fuerte indignación no solo entre los estadounidenses de origen chino, sino también a nivel internacional.
Se convocaron protestas en más de 25 ciudades de todo el país, durante las cuales algunos manifestantes llegaron incluso a acusar al presentador de ser responsable de promover el odio racial.
"Enseñen a los niños a amar, no a matar", "Boicot a la ABC", rezaban algunas pancartas en la movilización convocada frente a los estudios de la cadena.
ABC, responsable de la producción del programa, tuvo que pedir disculpas en dos ocasiones por haber ofendido a la comunidad china. Jimmy Kimmel, el presentador, también se disculpó e insistió en que no estaba de acuerdo con las palabras del niño.
No obstante, las disculpas parecen no haber sido suficientes y esta semana el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Qin Gang, instó a la cadena de televisión estadounidense a responder a las demandas legítimas de las comunidades chinas locales y a pedir perdón públicamente, una vez más, por emitir programas ofensivos.