Según reporta la cadena Al Arabiya con referencia a la agencia de noticias palestina Ma'an, el director del Instituto Forense Abu Kabir de Israel, Jehuda Hiss, admitió la sustracción de órganos de cadáveres de palestinos llevada a cabo desde inicios de los años 90 sin el permiso de las familias de los fallecidos y ha expresado la intención de las autoridades israelíes de devolver la parte que todavía se conserva.
"Empezamos extrayendo las córneas. No se les pidió ningún tipo de permiso a las familias de los fallecidos", confesó Hiss en el año 2000 en una entrevista con un académico estadounidense que fue publicada y transmitida por el Canal 2 de la televisión israelí solo una década después de su grabación.
El informe del Canal 2 reveló que los expertos forenses guardaron huesos, córneas, válvulas cardíacas y piel de ciudadanos de origen palestino, de soldados israelíes e incluso de trabajadores extranjeros muertos.
En la entrevista, Hiss también describió cómo ocultaban los médicos que a un cadáver se le habían extraído las córneas. "Bajábamos los párpados de los muertos y los pegábamos con cola", confesó.
El Ejército israelí admitió oficialmente la extracción de órganos, pero aseguró que actualmente esta práctica ya no se lleva a cabo.