Una enorme cúpula de acero, hecha por la compañía British Petroleum para detener el derrame de petróleo en el Golfo de México, podría empezar a bombear el crudo del pozo averiado el lunes, según declaró el director de exploración y producción de la empresa británica, Doug Suttles.
El miércoles pasado, la cúpula fue cargada en un barco que la llevará al lugar del derrame, a unos 80 kilómetros de la costa del estado de Luisiana. Este día, los especialistas planean colocarla en el fondo marino y conectarla durante el fin de semana con un barco que bombeará el petróleo, según informó el vocero de BP, John Curry.
El dispositivo, construido por la empresa Wild Well Control, pesa unas 98 toneladas y ayudará a recoger el 85% del crudo derramado del fondo, pero BP no tiene experiencia de instalar este tipo de equipos técnicos a una profundidad de más de 1.500 metros, como en este caso, y por lo tanto no hay garantías de éxito.
La plataforma marítma de BP, Deepwater Horizon, situada en el Golfo de México, se hundió el 22 de abril pasado tras un incendio de 36 horas provocado por una fuerte explosión. El accidente causó la avería de un oleodúcto submarino y la fuga de petróleo, que actualmente es de unos 5.000 barriles diarios. En el peor de los casos, la cantidad de crudo que se vierte diariamente al mar puede alcanzar 60.000 barriles, según Suttles.
BP asumió la responsabilidad por la catástrofe, reveló el martes que está gastando unos siete millones de dólares al día para combatir las consecuencias de la misma e informó que había transferido 25 millones más a Luisiana, Misisipi, Alabama y Florida para ayudar a financiar sus planes de respuesta.