"Pedimos al presidente [Hamid] Karzai que firme el Acuerdo Bilateral de Seguridad -BSA, según sus siglas en inglés-, antes de que concluya este año", dijo a los periodistas Ibrahim Qasimi, presidente de uno de los comités creados para redactar el texto.
En términos parecidos se expresó Rahima Jamey, presidenta de otro comité, que llamó a suscribir el BSA "cuanto antes".
Esa postura contrasta con la posición expresada por Karzai, en el que se mostró favorable a que el pacto militar con EE.UU. se firme tras las elecciones presidenciales previstas para abril.
El borrador del acuerdo establece las condiciones para prorrogar la presencia militar norteamericana después de que concluya en 2014 el proceso de retirada que hace dos años emprendieron las tropas de la Alianza Atlántica que se encuentran destacadas en Afganistán. El pacto prevé la presencia en el país de entre 10.000 y 15.000 soldados norteamericanos entre 2015 y 2024.
Las fuerzas estadounidenses que permanecerán en Afganistán después de 2014 estarán bajo la jurisdicción de EE.UU. y no estarán sujetas a los tribunales afganos. El Ministerio de Relaciones Exteriores afgano afirmó en su página web que las fuerzas de EE.UU. mantendrán "el derecho exclusivo para ejercer su jurisdicción".
El plan suscita el rechazo frontal del movimiento talibán y otros grupos insurgentes que operan en el país.