Pekín decretó que los aviones extranjeros que pasen por su zona de identificación deben proporcionar un plan de vuelo detallado, indicar su nacionalidad y mantener comunicación por radio con las autoridades de aviación de China a lo largo de todo su itinerario. Japón y Corea del Sur se niegan a obedecer la nueva normativa. Argumentan que la zona de identificación de defensa aérea de China se sobrepone a sus propias zonas de identificación ya existentes, lo que eleva "el riesgo de cálculos erróneos y accidentes". EE.UU. también está en contra de la iniciativa china, y sus bombarderos B-52 atravesaron la zona el miércoles también sin aviso previo.