"Hemos interrumpido voluntariamente las entregas de cargamento a través de la Línea de Comunicación Terrestre Paquistaní (GLOCC) desde la puerta de Torkham hasta Karachi para asegurar la seguridad de los conductores contratados", informa Reuters citando a Mark Wright,
portavoz del Pentágono.
La ruta cerrada, por la que pasa la mayor parte del tráfico terrestre de cargamento militar de EE.UU., fue recientemente blanco de los manifestantes pakistaníes, indignados por los ataques con drones de EE.UU. Wright dijo que los militares de EE.UU. esperan reabrir la ruta en un futuro próximo y señaló que EE.UU. tiene otras opciones para mover el equipo fuera del país.
Sin embargo, otras alternativas son mucho más costosas, incluyendo los envíos a través de la denominada Red de Distribución del Norte, una compleja red de rutas de tránsito a través de Rusia y Asia Central.
La última ola de indignación por parte de los paquistaníes vino provocada por la muerte del líder talibán paquistaní Hakimulá Mehsud
en un bombardeo estadounidense a principios de noviembre, justo cuando se iban a iniciar las conversaciones entre Islamabad y la cúpula insurgente.