Los inversores han empezado a mostrar interés en los negocios y el mercado de valores, dijo el mandatario iraní ante la Asamblea Consultiva Islámica de Irán.
"Las actividades económicas se han trasladado del oro, las divisas fuertes y los activos reales hacia el mercado de valores", señaló Rohaní, que aprovechó su presentación del presupuesto para el próximo año ante el Parlamento para subrayar la importancia del acuerdo alcanzado en Ginebra.
Según el acuerdo, a cambio de que Irán limite ciertos aspectos de sus actividades nucleares y permita realizar inspecciones de sus instalaciones nucleares, las seis potencias mundiales no impondrán nuevas sanciones al país islámico y suspenden algunas de las existentes, en particular sobre el comercio de hidrocarburos, automóviles, oro y metales preciosos, piezas de repuesto para aviones civiles, comida y medicina. Además, Irán obtendrá 4.200 millones de dólares, de los 100.000 millones de activos que tiene congelados por Occidente.
El proyecto de presupuesto para el año 1393 (nuevo calendario persa que empieza el 21 de marzo) –el primero para Rohaní, que asumió la Presidencia en verano– prevé un 50% más que el presupuesto del año en curso, y está preparado con los ojos puestos en el aumento de inversiones extranjeras, la privatización y la descentralización de la economía.