"Es una cantidad sin precedentes por lo que solicitamos a las autoridades locales que nos prestaran su sala de calderas. Y hoy esas drogas se han convertido en calor para los habitantes del pueblo", indicaron oficiales de la Policía antinarcóticos.
Los funcionarios administrativos de Yagunovo quemaron 120 sacos de drogas bajo la supervisión de la Policía. "El volumen de estupefacientes fue suficiente para proporcionar calor para una docena de casas, una escuela, un banco y un centro de artes durante 24 horas", agregaron.
Además indicaron que no se registraron casos de intoxicación en las inmediaciones del lugar donde las drogas fueron incineradas.