Meir Shalit, máximo responsable de las exportaciones de Defensa, no ofreció explicación alguna a su renuncia. Sin embargo, el portal israelí de noticias Arutz Sheva destaca que la decisión llegó después de una investigación oficial emprendida por EE.UU. Los investigadores descubrieron que sistemas de refrigeración en miniatura fabricados por la empresa israelí RICOR Cryogenic & Vacuum Systems que se usan en misiles y equipamiento electro-óptico aparecieron en Pekín y que el traslado se había realizado con la autorización de Shalit. Este viajó a EE.UU. para presentar sus disculpas oficiales, según el portal.
Israel explicó a Washington que antes del traslado los componentes estratégicos habían sido retirados en Europa, destinatario inicial de la carga. Sin embargo, este detalle no satisfizo a EE.UU. Washington insistió en que el mero hecho de que el equipo finalmente llegara hasta China presenta un riesgo para la seguridad en Oriente Próximo. Su temor principal es que desde China la tecnología avanzada se filtre a Irán, con quien el Gobierno de Pekín mantiene estrechos lazos comerciales.