La explosión, provocada por una terrorista suicida, ocurrió este domingo cerca de los detectores de metal de la entrada de la terminal, en el sur de Rusia.
La potencia del artefacto explosivo activado equivale al menos a 10 kilos de trilita. Según el Comité de Investigació, el arco de seguridad instalado en la estación de trenes ayudó a evitar un número más elevado de víctimas.