BP reintentará contener el derrame de petróleo tras un intento fallido
Los expertos de British Petroleum tratarán hoy de encajar un tubo delgado en la fuente principal del derrame de crudo en el Golfo de México para conducirlo a un barco, después de un primer intento fracasado.
El mecanismo consiste en instalar un tubo de 15 centímetros de ancho rodeado por un aro de goma en el tubo de 53 centímetros que arroja petróleo desde el suelo marino. El tubo pretende sacar el petróleo y trasladarlo hasta un buque tanque en la superficie y el aro de goma de alrededor impediría que el crudo se siga derramando en el mar.
Al mismo tiempo, la compañía comenzó hoy a usar disolventes químicos debajo de la superficie del mar para dispersar el petróleo. Tradicionalmente utilizados en la superficie, los disolventes actúan como un detergente para compactar el petróleo en pequeños glóbulos. Eso permite que el petróleo se disperse más rápido en el agua o en el aire antes de que las corrientes puedan llevarlo a la costa.
Tres semanas después de la explosión de la plataforma petrolífera que mató a once trabajadores y dejó un derrame desastroso, el presidente estadounidense, Barack Obama, atacó a los perforadores de petróleo y a su propia Administración, ordenando una revisión especial de los permisos de perforación.
Obama condenó el "espectáculo ridículo" de los ejecutivos petroleros que se echaron la culpa unos a otros en las audiencias del Congreso y criticó la "relación acogedora" entre las compañías petrolíferas y el Gobierno federal.
"No toleraré más la transferencia de culpas ni la irresponsabilidad", dijo Obama en la Casa Blanca, acompañado por miembros de su gabinete.
"El sistema falló y falló a lo grande. Y para eso, hay suficiente culpa para todos. Y todas las partes deberían aceptarla", dijo el presidente.