Los elementos creados con esta tecnología son una tapa de protección para la radio de la cabina de pilotos, la protección del tren de aterrizaje y piezas de aireación, según la empresa de seguridad BAE Systems, que desarrolla y fabrica piezas para los aviones de combate Tornado GR4.
Los detalles costaron menos de 165 dólares, señaló la empresa. El bajo precio de la impresión 3D y el hecho de que los detalles puedan fabricarse en cualquier lugar facilita su producción y podría permitir a la Fuerza Aérea del Reino Unido ahorrar unos 2,23 millones de dólares en los próximos 4 años, señalaron en BAE Systems.
"De repente ya no estás limitado en cuanto al lugar de fabricación de estas piezas", resumió en un comunicado Mike Murray, ingeniero de la empresa, añadiendo que esta tecnología permitirá también equipar barcos y portaaviones.