Durante su primera rueda de prensa, la mandataria surcoreana Park Geun-hye, que asumió la presidencia en febrero de 2013 destacó que la reciente ejecución del tío del líder del país vecino, Jang Song-thaek, y de sus seguidores es una muestra de la "inestabilidad" reinante en el gobierno de Kim Jong-un, informa la agencia surcoreana Yonhap.
"Nadie en el mundo puede decir con seguridad cómo se transformará Corea del Norte y qué medidas tomará," señaló la mandataria este lunes.
"En lugar de hacer predicciones prematuras, nos prepararemos para lo que pueda suceder", agregó.
Para ilustrar su escepticismo en relación a las iniciativas conciliatorias anunciadas por el líder norcoreano en su mensaje navideño, Park Geun-hye recordó que en el año 2013 Kim Jong-un pronunció un mensaje similar, lo que no impidió las subsiguientes tensiones en la península coreana que estallaron el año pasado. En cualquier caso, la presidenta de Corea del Sur subrayó que no descarta la posibilidad de estrechar los lazos diplomáticos entre ambos países y se dijo dispuesta a reunirse con su homólogo norcoreano ''en cualquier momento".
"Si Corea del Norte tiene la intención de renunciar a sus programas nucleares y de llegar a ser un miembro responsable de la comunidad internacional, tenemos la intención de trabajar con la comunidad internacional y a prestar apoyo activo a Corea del Norte", señaló.
Asimismo, la presidenta propuso celebrar a finales de este mes las reuniones de familias separadas entre el Norte y el Sur, expresando su intención de reforzar la asistencia humanitaria y los intercambios con el país comunista.