Canciller de Israel: Los árabes israelíes son unos "esquizofrénicos"

El canciller israelí cree que el acuerdo de paz con Palestina que incluiría la transferencia de la región habitada por árabes israelíes, es lo mejor tanto para Israel como para esas personas que son incapaces de decidir si son israelíes o palestinos.
El ministro de Relaciones Exteriores hebreo, Avigdor Lieberman, en una entrevista concedida al diario británico 'British Telegraph' afirmó que los árabes con ciudadanía israelí necesitan decidir a quién son leales: a Israel o a los palestinos.

"Ellos sufren una especie de esquizofrenia", declaró el alto funcionario, refiriéndose a la población árabe que reside en el territorio de Israel gozando de la ciudadanía local. "No saben si son ciudadanos israelíes o si son palestinos. Incluso durante los partidos de fútbol se pueden ver unas banderas palestinas", añadió.

"Es la mejor propuesta que podemos conseguir y realmente apreciamos los esfuerzos del Secretario de Estado de EE.UU., John Kerry. Él realmente ha puesto un montón de energía en el tema", afirmó Lieberman.
 
A principios de esta semana, el canciller durante una reunión de diplomáticos en su oficina subrayó que su partido no aceptaría un tratado con los palestinos sin una transferencia de tierras: la región habitada por los árabes en el norte de Israel por los asentamientos israelíes en Cisjordania.

En el punto de vista del ministro israelí está la región de Israel, poblada generalmente por árabes israelíes, Uadi Ara, situada al noroeste de la llamada Línea Verde: la línea de demarcación del armisticio árabe-israelí de 1949, que ahora separa formalmente a Israel de los territorios ocupados de los palestinos. Según el político, no existe ninguna razón por la cual la zona israelí dominada por los árabes no pueda unirse a los territorios de sus hermanos palestinos para la creación de su futuro Estado.

El ministro especificó que no se trata de una transferencia, como en el caso de Gush Katif: la región al sur de la Franja de Gaza, donde en 2005 tras la evacuación de la población fueron destruidos los asentamientos judíos al amparo del Plan de Desconexión del Gobierno israelí. "No vamos a expulsar a nadie de su casa y no vamos a desalojar a nadie, solo estamos moviendo la frontera", dijo Lieberman al periódico británico.

El plan del canciller ha provocado fuertes críticas por parte de sus oponentes políticos.