Rusia preocupada por situación étnica en Kosovo
Rusia está seriamente preocupada por la difícil situación étnica en Kosovo. Esto dijo el representante permanente de Rusia ante las Naciones Unidas, Vitaly Churkin, en una sesión pública del Consejo de Seguridad de la ONU dedicada a la situación en la provincia serbia.
El diplomático ruso consideró terrible la situación del retorno a Kosovo de los desplazados. "Por desgracia, sin atención quedan los numerosos casos de serbios que se ven obligados a vender sus bienes y viajar fuera de la región", dijo. "Todo esto indica una tendencia de cero tolerancia entre las etnias de Kosovo. Más bien, vemos lo contrario. En esta zona se ha producido un retroceso", dijo Churkin.
El diplomático ruso acusó a las autoridades de Kosovo de la persecución de los serbios y de la discriminación étnica y religiosa.
La situación en cuanto a la conservación del Patrimonio Cultural Ortodoxo serbio también es preocupante. Churkin señaló que las profanaciones de cementerios serbios e iglesias cristianas en Kosovo son frecuentes. "En este contexto, despierta desconfianza que la policía de Kosovo esté ahora encargada de la protección de sitios importantes del patrimonio serbio y que se tienda a reducir el número de la KFOR", dijo.
Esto es doblemente terrible, ya que muchos ex militares de Kosovo que lucharon contra los serbios ahora sirven en la policía.
Además, provoca preocupación que "los kosovares avalados por la presencia internacional, especialmente de la Misión de la UE (IGAD) en el ámbito del derecho, empezaron a desmantelar empresas operadoras de telefonía móvil serbias, así como los intentos de Pristina para adoptar una ley que establezca el uso de pasaportes extranjeros para dejar entrar a ciudadanos de Serbia al territorio de Kosovo. La comunidad internacional debe hacer una evaluación jurídica y política de estas acciones de las autoridades de Kosovo, porque podría provocar un fuerte aumento de las tensiones entre las comunidades", dijo el representante permanente de Rusia ante la ONU.
La misión internacional apoya abiertamente a las autoridades separatistas de la región rebelde, hiriendo los derechos de los cristianos serbios, a quienes pertenece esta región.
"La connivencia de las autoridades de Pristina y a veces la falta de acción por parte de la IGAD dañan la reputación de esta misión, que debería estar más allá de la neutralidad, según su mandato", señaló el diplomático. "En estas condiciones, Rusia exige que la IGAD se adhiera estrictamente a los principios de la Resolución 1244, actuando de una forma equilibrada y teniendo en cuenta los intereses de ambas partes ", declaró Churkin.
Rusia está indignada por la situación en Kosovo y como muchos otros países no reconocerá la independencia de esta provincia de Serbia.