"Podemos y debemos mantener estas capacidades a la vez que damos respuesta a la preocupación sobre la privacidad y las libertades civiles que genera el hecho de que el Gobierno disponga de estos megadatos", dijo al diario 'USA Today' un alto funcionario de la Casa Blanca, que pidió mantener el anonimato.
Según el funcionario, Obama modificará el programa de manera que sea necesario obtener una orden judicial cada vez que se recopilan los datos. Obama anunciará el paquete de medidas este viernes en su esperado discurso en el Departamento de Justicia.
Sin embargo, el funcionario dijo que Obama no va a dar ninguna recomendación acerca de quién debe controlar la recopilación de los datos y pedirá que esa decisión la tomen el fiscal general, la comunidad de inteligencia y el Congreso.
Obama pedirá al fiscal general, Eric Holder, y a la comunidad de inteligencia preparar un informe para el 28 de marzo sobre cómo gestionar el programa a largo plazo. El presidente también consultará a los comités relevantes del Congreso.
"Se trata de una serie de modificaciones muy abstractas que intentan maquillar este problema internacional y nacional que tiene el propio Obama con las funciones de la NSA", dijo Camacho, que subrayó que de las 46 medidas propuestas por un comité especial se adoptarán "medidas muy simplistas".
"Para solucionar el problema hace falta una operación de cirugía, pero lo único que están haciendo es aplicar maquillaje", dijo Camacho.