"EE.UU. exigió que entabláramos en negociaciones directas con la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria, pero hemos dicho que no lo haremos hasta que Kerry se disculpe por las palabras que dijo en su discurso en Montreux", destacó el ministro de Exteriores de Siria, Walid Muallem que encabezó la delegación del Gobierno.
En la conferencia John Kerry hizo un comentario poco halagador sobre el presidente Bashar Al Assad, afirmando que después de haber cometido atrocidades contra su propio pueblo, el líder sirio supuestamente no puede desempeñar ningún papel en el futuro de Siria.
Muallem descartó por completo la posibilidad de transferir algunos poderes del presidente Al Assad a una autoridad de transición o a un Gobierno tal y como exige la oposición. Según él, una medida de esta índole "sería contraria a la Constitución, que fue aprobada en el referéndum por el pueblo sirio".