"Es una gran medida y sin duda un reconocimiento a nuestros vínculos históricos con España 500 años después de la expulsión", dijo a Efe Asher Moshé, nacido en Skopje, capital de la actual Macedonia, y emigrado a Israel con once años.
El viernes el Consejo de Ministros de Mariano Rajoy aprobó una modificación del Código Civil para conceder la nacionalidad española a todos los sefardíes que lo pidan y acrediten tal condición, que permitirá además que mantengan la de su país de origen.
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, destacó que de esta forma la sociedad española culmina la reparación "de lo que sin duda había sido uno de los errores históricos más importantes". "Había una deuda histórica con aquellos que siempre han querido ser españoles, que allá donde viviesen han llevado nuestra lengua, el sentido de pertenencia", agregó.
En 1492 el Decreto de la Alhambra o Edicto de Granada, promulgado por los Reyes Católicos Isabel y Fernando, forzó la expulsión de todos los judíos que no aceptaran convertirse al catolicismo. Se estima que pudieron ser hasta 200.000 personas.