Los escandalosos titulares sobre el supuesto ultimátum por parte de Rusia a Crimea, figuraron en muchos medios occidentales. Todos acusaban a Rusia de amenazar con una intervención si las fuerzas ucranianas no se rendían antes de una fecha límite. Sin embargo, ninguna de las fuentes militares ucranianas ha confirmado esta información. La fecha límite ha llegado, pero no ha ocurrido nada. En Moscú no solo han desmentido estas acusaciones, sino que además las han calificado de una tontería.
Jalife-Rahme, profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México, dijo a RT que "la histeria mediática" occidental que tiene como objetivo presentar las acciones de Rusia en Crimea como un intento de invasión, "carece de argumentos".
La doble moral manifestada por la prensa occidental desde siempre defiende los intereses de la Casa Blanca y presenta el golpe de Estado que se produjo en Ucrania como una revolución, afirma el profesor.
El poder mediático de EE.UU. se basa en una financiación abundante, por ello en el mundo occidental sus medios aliados prácticamente hablan solos, no existe una oposición o el derecho de réplica. El experto señala que Rusia no tiene la misma presencia mediática que EE.UU. en el mundo occidental, por ello todo respecto a la cobertura de la crisis ucraniana y el papel de Rusia se presenta de una manera tergiversada.
Así, los medios occidentales intentan pintar a Rusia como a un agresor en referencia a la situación en Ucrania: se dice que fueron enviadas tropas rusas a Crimea y en realidad la Flota rusa tiene arrendada sus bases allí desde hace décadas, en virtud de un acuerdo vigente hasta el año 2042.
Al publicar esa gran cantidad de información falsa, los medios han olvidado que el presidente ruso no ha dado una orden oficial de desplegar las tropas rusas en Ucrania. Rusia ha reiterado que no quiere una guerra con Ucrania y que no está interesada en la anexión de la república autónoma de Crimea. En cuanto al permiso de enviar nuevas tropas hasta que se normalice la situación, el presidente ruso afirmó que todavía no ha tomado ninguna decisión al respecto y que esta decisión va a depender del desarrollo de los hechos.
También vemos reportajes sobre la supuesta presencia de tanques rusos. Pero según el mismo patrullaje fronterizo de Ucrania, ”ninguno de los equipos militares de Rusia ha cruzado la frontera”. La semana pasada se registraron maniobras militares, pero solo en territorio ruso y no precisamente en Ucrania como afirmaban.
Jalife-Rahme señala que, en cambio, cuando se habla de la política de Washington llevada a cabo en otros países como Afganistán o Irak, se presenta como una actuación legítima, cuando no lo es. La injerencia de EE.UU. en Irak fue ilegítima. A pesar de que no se descubrieron armas de destrucción masiva en el país, Washington "se pasó por el arco del triunfo a la ONU". Lo mismo pasó en Yugoslavia y con otra serie de países, incluyendo Ucrania, que actualmente están hechos un desastre tras la intervención de EE.UU. en su política, que usa a otras naciones para avanzar en sus intereses geopolíticos y sigue logrando sus objetivos utilizando, entre otros medios, las maniobras mediáticas.