El mandatario ruso realizó estas declaraciones en una conferencia telefónica con el primer ministro británico, David Cameron, y la canciller alemana, Angela Merkel.
El Parlamento de Crimea adoptó unánimemente el jueves pasado la decisión de pasar a formar parte de la Federación de Rusia y convocó un referéndum popular sobre el estatus de Crimea para el 16 de marzo.
La península no reconoce el autoproclamado Gobierno en Kiev que el pasado 22 de febrero destituyó al presidente Víktor Yanukóvich, cambió la Constitución y convocó elecciones anticipadas.
Desde entonces, el país se ha visto al borde de una guerra civil, dado que las regiones del este y el sureste no reconocen la legitimidad del nuevo Gobierno autoproclamado en Kiev.
Junto con la formación de tropas de autodefensa en la península, varias unidades militares ucranianas han jurado su lealtad a las autoridades de Crimea.
Tras acusar a Rusia de enviar fuerzas armadas a la península, EE.UU. anunció esta semana que suspende las negociaciones comerciales y la cooperación militar que mantiene con Moscú.