Óscar Wilde: el pecado de ser homosexual
Hace 115 años, el escritor, poeta y dramaturgo Óscar Wilde fue condenado en la puritana Inglaterra victoriana. La sentencia de dos años de prisión y trabajos forzados fue dictada luego de un famoso juicio en el que el escritor fue acusado de "indecencia grave" por actos homosexuales. Al cumplir la condena, Wilde abandonó el Reino Unido y se exilió en Francia donde murió en 1900, empobrecido, enfermo y solo.
Wilde fue condenado por sostener una relación homosexual con el joven aristócrata lord Albert Douglas, misma que fue denunciada por el marqués de Queenberry, padre de su amante, quien originalmente fue acusado de difamación por Wilde. El juicio dio un giro inesperado centrándose en la vida privada del escritor y el 27 de mayo de 1895 fue sentenciado a pesar de las peticiones de clemencia efectuadas por sectores liberales de la sociedad.
En su defensa legal, Wilde definió su amor como “la más bella y noble forma de afecto”. Se le atribuye al escritor haber enunciado la frase: “Amor que no se atreve a pronunciar su nombre”, pero en realidad esta proviene del poema “Two Loves” (Dos amores), de Abert Douglas.