Una tercera fuente, también cercana a la investigación, dijo a la agencia de noticias que las investigaciones se están centrando cada vez más en la teoría de que alguien con conocimientos en aviación secuestró la aeronave para desviarla deliberadamente a cientos de kilómetros de la ruta prevista de Kuala Lumpur a Pekín. "Lo que podemos decir es que estamos buscando pruebas de sabotaje", dijo la tercera fuente, un oficial de alto rango de la Policía de Malasia, agregando que en concreto estudian un "secuestro".
Las tres fuentes se negaron a ser identificadas porque no estaban autorizadas para hablar con los medios de comunicación debido a la sensibilidad de la investigación. Reuters asegura que varios funcionarios del Ministerio de Transporte de Malasia se negaron a hacer declaraciones.
Cabe señalar que la Policía de Malasia afirmó anteriormente que estaban investigando si algún pasajero o miembro de la tripulación tenía problemas personales o psicológicos que puedan arrojar luz sobre el misterio, junto con la posibilidad de un secuestro, sabotaje o falla mecánica.
Este es uno de los misterios más desconcertantes en la aviación moderna, pues el piloto no dejó señal de socorro y tras casi una semana de intensivas búsquedas con aviones y buques de una docena de países no se ha logrado encontrar ni un solo escombro que lleve a aclarar esta catástrofe.