"Yatseniuk es la cara de la toma ilegal de poder. Es decir, es una cara occidental, liberal, un intento de vender la toma ilegal del poder a los consumidores occidentales de noticias y al público occidental en su sentido más amplio. Hablando de sus logros, el primero de los cuales sería ocupar la posición de primer ministro, también ha logrado vender la idea de la austeridad a la población de Ucrania, venderles la idea de que el FMI va a rescatarles, de que las potencias occidentales, la UE y EE.UU., de alguna manera van a conservar y proteger un futuro económico Ucrania", dijo Draitser.
Sobre la reciente visita de Yatseniuk a EE.UU., el analista considera interesante que llegara a Washington representando a "la voz de Ucrania" y "la legítima voz del pueblo de Ucrania", aunque de facto está absolutamente fuera del marco de la legislación internacional y no se corresponde a lo que ocurre en realidad.
"Por su puesto sabemos que Yatseniuk fue aupado al poder por unas fuerzas particulares en Occidente, como podemos deducir de las llamadas telefónicas de Victoria Nuland", sostiene Draitser.
"Cada vez que el Gobierno de EE.UU. se refiere a la gente [de Ucrania], lo que realmente quiere decir es 'su gente', sus interés elegidos, sus títeres políticos, etc., y Yatsenyuk es realmente un buen ejemplo. Cuando habla de la gente, me pregunto si él también se refiriere a los nazis que también han tomado el poder, a la derecha, Yarosh, Parubi y si todos aquellos que han tomado ilegalmente el poder por la fuerza son parte de la llamada 'gente'. Esta sería la pregunta que me gustaría hacer al presidente Obama si tuviera ocasión", dijo.
"Sin embargo, en el caso de Crimea, por supuesto, Washington ya ha descartado la idea de que tenga derecho a la autodeterminación, de que Crimea tenga el derecho a la independencia", comentó el analista, haciendo notar que se ha creado una situación que contradice los precedentes creados por los países occidentales.
"De nuevo, esto nos devuelve a la pregunta de si EE.UU. está verdaderamente interesado en la democracia o si EE.UU. solo utiliza la democracia como pretexto conveniente para promover sus intereses geopolíticos", añade.
"No está claro a qué se refiere Yatseniuk cuando dice que no se rendirá. Por un lado, no está claro porque ¿quién tiene a su cargo Yatsenyuk exactamente? Sabemos que elementos nazis del Sector Derecho y de Svoboda y otros han ocupado puestos claves en las fuerzas de seguridad. Si se está refiriendo a ellos, entonces, sin duda, tiene sentido decir que no se rendirán. Pero, ¿hasta qué punto Yatsenyuk tiene el apoyo en Ucrania? Sin duda, esto sigue siendo una cuestión abierta".