"Catar es un país sin conciencia". Así comienza el informe de la CSI sobre las condiciones de trabajo y de vida de los 1,4 millones de trabajadores inmigrantes que viven en Catar. Después de leer el informe, es difícil no estar de acuerdo, asegura Tom Ley en un artículo publicado en Deadspin.
Catar es un país sin concienciaEl informe se basa en las cifras recientemente proporcionadas por las embajadas de los dos países de origen de la mayoría de los trabajadores inmigrantes. En el caso de Nepal, 400 trabajadores de ese país han muerto en Catar desde 2010, año en que se le adjudicó la organización del certamen futbolero. La embajada de la India, a su vez, informa de que 694 conciudadanos han muerto entre 2011 y 2013.
"Sean las causas de las muertes registradas como accidentes laborales, ataques cardíacos (debidos a las altísimas temperaturas) o enfermedades causadas por las condiciones de vida miserables, la causa fundamental es la misma: las condiciones de trabajo", concluyó la CSI.