Se celebró el martes en París una ceremonia ecuménica para recordar que se cumple un año desde que se estrelló en el oceáno Atlántico, por causas aún desconocidas, un avión de Air France con 228 personas a bordo, según informó AFP.
Más de 1.000 personas, entre ellas 900 familiares, procedentes tanto de Francia como de Brasil, Alemania e Italia, participaron en la ceremonia, que tuvo lugar a puerta cerrada en un salón del Parque Floral, en la periferia de la capital francesa. Asistieron al homenaje el secretario de Estado francés de Transporte, Dominique Bussereau, el director general de Air France, Pierre Henri Gourgeon, el director general de la Oficina de Investigaciones y Análisis (BEA), Jean Paul Troadec, y el secretario general del constructor aeronáutico europeo Airbus, Marc Fontaine.
Durante la ceremonia de homenaje, responsables de cuatro confesiones religiosas -católica, musulmana, protestante y judía- y familiares de las víctimas, leyeron textos y poemas entregados a los asistentes en seis idiomas. Tras un almuerzo ofrecido en el mismo recinto del Parque Floral, las familias se trasladaron al cementerio parisino de Pére Lachaise, donde se descubrirá una estela idéntica a la inaugurada en Rio de Janeiro con 228 golondrinas talladas en un material transparente.
Actualmente la BEA considera como uno de los factores del accidente, que se cobró las vidas de 216 pasajeros y 12 tripulantes, un fallo de los sensores de velocidad Pitot, pero sólo las cajas negras permitirán establecer las causas exactas de la tragedia.
Las asociaciones de familiares de las víctimas reclamaron el lunes en París la participación de expertos internacionales en las investigaciones, la creación de una comisión de peritaje europea y una cuarta búsqueda de las cajas negras.