El mandatario depuesto dijo que las elecciones presidenciales de Ucrania, previstas para el próximo mes de mayo, serán ilegítimas. Según sus palabras, no tendrán ningún beneficio para la sociedad ni el Estado, y solo desestabilizarán aún más la situación.
"Los comicios serán ilegítimos porque las autoridades actuales no gozan de legitimidad", aseguró Yanukóvich, que opina que antes de las elecciones es necesario realizar una reforma constitucional.
"Después de la reforma constitucional habrá que celebrar elecciones parlamentarias o presidenciales. La prisa en la decisión sobre la celebración de las elecciones presidenciales es una manera de desestabilizar aún más la situación en el país, y cualquier desestabilización en esas circunstancias conlleva una gran amenaza de escisión social, incluso una posible división del Estado", señaló Yanukóvich.
Yanukóvich calificó la salida de Crimea del territorio de Ucrania de "tragedia" a la que había llevado el crecimiento de la disidencia causado por la política del nuevo Gobierno.
El político subrayó que estos sentimientos de protesta en una región tan grande como Crimea llevaron a la salida 'de facto' de la península del territorio ucraniano. "Yo personalmente no puedo aceptarlo", destacó.
Asimismo, Víktor Yanukóvich admitió que se debió reaccionar mucho antes a las actividades de criminales y nacionalistas. Según el político, el actual Gobierno no tiene ninguna influencia sobre los grupos radicales, pero las autoridades autoproclamadas fingen que no les afecta.