"No buscamos la confrontación con Rusia, pero sus acciones en Europa y Eurasia pueden conducir a los Estados Unidos a revisar su dispositivo militar y sus necesidades para futuros despliegues, ejercicios y entrenamientos en la región", señaló el subsecretario del Departamento de Defensa de EE.UU., Derek Chollet.
El funcionario militar acusó a Rusia de una "intervención militar" en Ucrania e indicó que eso "desafía la visión estadounidense de una Europa unida, libre y en paz", y añadió que "cambia el panorama de la seguridad de Europa, causa inestabilidad en las fronteras de la OTAN y es un desafío al orden mundial", dijo.
Sin embargo, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, aseguró que Moscú no tiene y no puede tener ninguna intención de intervenir en la región sureste de Ucrania. Recientemente el canciller ruso dijo que Occidente asumió el papel de árbitro respecto a la situación en Ucrania, donde las autoridades gubernamentales, además, no son independientes.
Alrededor de 67.000 militares estadounidenses están estacionados actualmente en el continente europeo, sobre todo en Alemania (40.000), Italia (11.000) y el Reino Unido (9.500). En 1991 cuando cayó la Unión Soviética en total había 285.000 militares de EE.UU. en Europa, informa AFP.
Chollet, que intervino ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes, no especificó en qué consistiría la revisión. Las declaraciones llegan en un momento en el que el Pentágono se enfrenta a duros recortes presupuestarios y trata de dirigir parte de sus medios hacia la región Asia-Pacífico.
Según el portavoz de la Casa Blanca Josh Earnest, últimamente EE.UU. envió seis F-15 para patrullas aéreas del mar Báltico y una docena de aviones F-16 a Polonia para ayudar en la defensa de este país. Además, el destructor Truxtun prorrogó su estancia en el mar Negro. Este martes se supo que el destructor de la Armada de EE.UU. Donald Cook entró en aguas del Mar Negro.
Por otra parte, el asalto de edificios administrativos por manifestantes contrarios al Gobierno en Donetsk y Járkov en el este de Ucrania es "muy preocupante", expresó Chollet, descartando que sean "manifestaciones espontáneas". "Entrar en el este de Ucrania sería claramente una escalada muy grave de esta crisis", sostuvo.
A finales de marzo Moscú declaró que las acusaciones fomentadas por los medios de Occidente de que existe una amenaza militar de Rusia contra Ucrania son infundadas. Las declaraciones en los medios de comunicación acerca de la "concentración" de fuerzas armadas rusas en las zonas fronterizas con Ucrania contradicen los resultados de las inspecciones realizadas por Occidente, dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Alexánder Lukashévich.
La semana anterior, una misión de observadores ucranianos finalizó los vuelos de inspección sobre territorio ruso ante el supuesto incremento de efectivos militares de Rusia en la frontera con Ucrania, e informaron de que no detectaron ninguna amenaza para Kiev.