Tanto la Administración de Obama, como la imagen del país en general, sufre graves fluctuaciones tanto en el mismo territorio estadounidense, como en la arena internacional. Mientras que, a pesar de las revelaciones de Edward Snowden, la mayoría de los aliados de EE.UU. sigue a su lado, en el mundo existen varios países que "odian" a Washington, informa rotativo el '24/7 Wall St'.
1. Territorios palestinos
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 80%
Cuatro de cada cinco palestinos desaprobaron la política norteamericana, lo que supone la peor percepción de EE.UU. a nivel mundial. La causa de tal situación es el apoyo estadounidense a Israel en el marco de su conflicto con Palestina. Además, Hamas, la organización que gobierna el territorio de la Franja de Gaza desde el 2007, es considerada por EE.UU. y la UE como una "organización terrorista".
2. Pakistán
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 73%
Las relaciones con Pakistán han sido tensas desde el 2001, cuando tras los ataques terroristas del 11-S Washington convirtió a Pakistán en el campo de operaciones de su búsqueda del líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, y la guerra contra los talibanes en Afganistán, que entonces gobernaban el país vecino. Ya en el 2009, el 59% del pueblo pakistaní vio a EE.UU. como a un matón y una amenaza más grande que la de la propia Al Qaeda. Las últimas encuestas de Gallup revelan que esa tendencia se mantiene.
3. Líbano
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 71%
Al igual que muchos países que desaprueban la línea norteamericana, el Líbano tiene una larga historia de conflicto con Israel, lo que explica que los libaneses critiquen a Washington.
4. Yemen
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 69%
Más de 100 ciudadanos yemeníes han sido recluidos en Guantánamo en los últimos años. Las relaciones entre ambos países son tan tensas que el Departamento de Estado de EE.UU. aconseja a sus ciudadanos evitar viajar a Yemen debido al nivel extremadamente alto de amenaza a la seguridad.
5. Irak
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 67%
La larga historia de conflictos entre EE.UU. e Irak —desde la Guerra del Golfo en 1991 hasta la Guerra de Irak (2003 – 2011)— que causaron la muerte a cientos de miles de iraquíes, entre ellos civiles, ha contribuido significativamente a las opiniones negativas respecto a Washington. Para los ciudadanos de EE.UU. "viajar al país es extremadamente peligroso debido a los disturbios civiles y la amenaza de secuestros y ataques terroristas".
6. Egipto
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 57%
A la lista de los países "no recomendados para viajar", el Departamento de Estado de EE.UU. ha añadido también a Egipto, "debido a la inestabilidad y la violencia en todo el país".
7. Eslovenia
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 57%
A pesar de que el Departamento de Estado de EE.UU. afirma que las dos naciones tienen una relación fuerte, más de la mitad de los ciudadanos de Eslovenia critican la política de Washington. Cabe mencionar que entre las naciones con las más altas calificaciones de desaprobación de EE.UU., Eslovenia es única que es miembro de la OTAN.
8. Irán
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 56%
Teherán ha estado durante mucho tiempo en desacuerdo con Washington, y más recientemente por el programa nuclear iraní. Los dos países no tienen relaciones diplomáticas desde 1980. Adicionalmente los analistas políticos han acreditado que las sanciones de la UE y EE.UU., que causaron algunos de los problemas económicos del país y que tuvieron graves consecuencias para gran parte de la población, se tradujeron en más resentimiento hacia EE.UU.
9. Túnez
Índice de desaprobación de las políticas de EE.UU.: 54 %
Aunque EE.UU. proporcionó 400 millones de dólares en ayuda financiera para "establecer la democracia" en el país desde el año 2011, más de la mitad de la población desaprueba la política de Washington. La animosidad hacia el país norteamericano en Túnez culminó en el saqueo de la Embajada de EE.UU. en la capital en 2012. Los recientes sondeos confirman la misma tendencia entre los tunecinos.