"En las áreas donde tiene sus bases nuestra Flota serán creadas unidades de defensa antiaérea e infantería de marina. Este año la Flota del Mar Negro recibirá nuevos submarinos y buques de superficie de nueva generación", anunció el ministro en una videoconferencia.
Asimismo, Shoigu, que a finales de marzo visitó la península y la antigua base de la Flota rusa en el Mar Negro, precisó que el Ministerio de Defensa asignará 86.700 millones de rublos (unos 2.400 millones de dólares) para mejorar sustancialmente la infraestructura de la Flota en la península de Crimea.
Ahora, cuando todas las bases cerca de Sebastopol vuelven a quedar bajo control ruso, la Marina amplía su infraestructura con otras instalaciones, como la base naval de la localidad de Donuzlav y varias bases aéreas. Sin embargo, tras 20 años de control ucraniano, las instalaciones militares requieren una actualización completa debido a la carencia de inversiones por parte de Ucrania para mantenerlas 'a flote'.
En cuanto a los submarinos y buques que recibirá la Armada rusa en el Mar Negro, expertos militares rusos sugieren que, seguramente, se trate de avanzados patrulleros del proyecto 11356 (el Admiral Grigoróvich, su cabeza de serie, fue botado en Kaliningado el 14 marzo) y de seis nuevos submarinos de ataque de propulsión convencional del proyecto 636,3 ('clase Improved Kilo', según la clasificación de la OTAN).
Previsiblemente, en la península de Crimea se desplegará una nueva brigada de tropas de misiles y artillería costera dotada de sistemas de avanzados misiles antibuque.