Durante la prueba realizada en aguas de la costa de California, el sistema, que se basa principalmente en sensores infrarrojos para localizar objetivos incluso en el agua, fue capaz de desactivar dos botes de goma a una distancia de 1,5 kilómetros invirtiendo en ellos menos de 30 segundos. De acuerdo con los diseñadores del programa, ADAM es capaz de atacar objetivos como aviones no tripulados, pequeñas embarcaciones y cohetes Qassam.
"Nuestras pruebas del sistema ADAM han demostrado que los láseres de alta energía están listos para atender las necesidades esenciales de la Defensa", dijo Tory Bruno, presidente del departamento para el desarrollo de los sistemas de defensa de misiles estratégicos de Lockheed Martin.
Previamente, la empresa demostró las capacidades del sistema en la lucha contra objetivos aéreos en vuelo, incluyendo cohetes de pequeño calibre y un objeto no tripulado, rastreando con precisión los objetos en movimiento a una distancia de más de 5 kilómetros y atacándolos a distancias de hasta 2 kilómetros.