Para el mandatario uruguayo, "el populismo es la peor enfermedad de la democracia en el Sur y la mayor patología en el Norte es el 'lobby' de los poderosos".
Asimismo reafirmó su compromiso en favor de la unidad latinoamericana, con políticas de distribución de la riqueza. En ese sentido, destacó a Hugo Chávez, el líder venezolano fallecido en marzo del 2013, que tuvo tal sentido de la solidaridad con el continente que "por momentos pienso que dio más de lo que tenía" y "ahora le están pasando la factura".
La guerra no se justifica de ninguna manera. Hay que luchar por negociar hasta el juicio final; la peor negociación es mejor que cualquier guerra
Además, indicó que en la reunión que mantuvo con su par estadounidense Barack Obama en la Casa Blanca, también se discutió sobre la situación en Venezuela, abogando por una solución en el marco del diálogo entre el Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición.
Además, defendió el derecho a la soberanía y la autodeterminación del pueblo venezolano. No obstante, el presidente uruguayo consideró que la minoría de la oposición venezolana está "para cortar las calles", en una posición de golpismo que se opone a la otra mayoría de la oposición, que es democrática.
Es cierto que Venezuela tiene dificultades económicas, políticas y sociales, pero "en nuestros países siempre hay problemas, en Estados Unidos también, pues siempre hay un margen de población disconforme en cualquier lado, porque la unanimidad no existe ni va a existir", apuntó.
Son recetas golpistas que están circulando, según Mujica, y que son utilizadas para derrocar a gobiernos populares. Esto no solo ocurre en Venezuela sino que también "lo estamos viendo en Brasil, con manifestaciones a las que no se encuentran explicación", sobre todo al tratarse de un país futbolero y a menos de un mes del comienzo del Mundial.
En cuanto a las negociaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y las FARC, Mujica consideró que es necesario hacer todos los esfuerzos posibles por ayudar a que el proceso prospere.
"Espero que las FARC hagan la paz con el Gobierno colombiano, y todos deberíamos de hacer esfuerzos para ayudar (…) La guerra no se justifica de ninguna manera. Hay que luchar por negociar hasta el juicio final; la peor negociación es mejor que cualquier guerra", sentenció.