Robots garzones

En Bangkok se abrió un restaurante donde los garzones son robots. Las máquinas, vestidas con trajes de los samuráis, no sólo sirven los platos pedidos y recogen las mesas, sino que además reciben a los invitados y los acompañan hasta sus mesas.

Para hacer el pedido, en una pantalla sensible del robot hay que seleccionar la imagen que corresponde al plato que el cliente va a comer. Tras ciertos minutos la máquina humanoide traerá la comida. Para entretener a los clientes, mientas va de una mesa a otra el camarero mecánico baila.

Casi un millón de dólares gastaron los propietarios de este restaurante único para comprar robots, pero según ellos, los gastos se cubrirán pronto. Ahora este local robotizado es uno de los más populares de la ciudad; la gente llega no solamente para disfrutar de los platos de cocina japonesa, sino también para sacarse fotos con un robot.

“Comprarlos no fue barato, pero estábamos seguros de que atraerían a los clientes y no nos equivocamos. Ahora incluso estamos pensando en abrir otro restaurante semejante”, dijo el administrador del restaurante.

Según sus dueños, los camareros robots son empleados ideales, puesto que atienden rápidamente a los clientes, no necesitan descanso durante el día y no hay que pagarles salario, informó Associated Press.