Esto es lo que parece estar pasando hoy día en el conflicto de Ucrania, sobre el que los medios 'mainstream' (de corriente principal) están mostrando a los espectadores y a los lectores de todo el mundo una realidad en muchas ocasiones muy alejada de lo que realmente sucede en ese país.
El germen de esta crisis, la ayuda salvífica de EE.UU., la demonización de Rusia, los datos sobre los muertos y sobre quién es responsable de estos cadáveres... todo parece seguir un patrón. Pero este guión se ha encontrado con una fuerte resistencia, que no es ni más ni menos que la de la verdad de los hechos: el peso de la cruda realidad.
En general, parece que los conglomerados mediáticos (televisiones, agencias y periódicos) detrás tienen una mano que parece indicarles qué tecla deben tocar y qué es lo que se debe enseñar al espectador para generar en la opinión pública un escenario que les beneficie.
En este sentido vemos muchos ejemplos en los que los medios, alejados de su misión de informar y analizar, lo que hacen es crear alarma social y generar caos, pánico e incluso incitar a que se agraven determinadas situaciones. Y esto ocurre ahora en Ucrania.
EE.UU., pantalla para la mafia globalista
"Son muchos los periodistas en EE.UU. que vienen percatándose de que los últimos años el Gobierno de Obama, que es una pantalla para una mafia globalista que está hambrienta de control mundial, busca desviar la atención del pueblo hacia temas sin importancia para esta nación con el objetivo de que el pueblo no mire las verdaderas situaciones caóticas, como el colapso de la economía y la pérdida total de la confianza por parte de la ciudadanía de EE.UU. en su Gobierno", comentó la situación el director de la Federación de Editores Hispanos de EE.UU., Eladio José Armesto.
Se ve el esfuerzo para demonizar al pueblo y al Gobierno de Rusia
"Se ve el esfuerzo para demonizar al pueblo y al Gobierno de Rusia con miras a aislarlo y marginarlo internacionalmente debido a que el Gobierno de Rusia no está obedeciendo las órdenes de la mafia globalista que utiliza al Gobierno estadounidense", concluye el analista.
Periodismo de conflicto
"Hay dos realidades totalmente opuestas: una es la realidad del mundo de a pie de calle que viven los ucranianos, los vecinos, los civiles, y por otro lado está la geopolítica que tiene su reflejo en los medios de comunicación. Los medios que están ofreciendo un retrato reduccionista (...) que no tiene en cuenta a miles de ucranianos, sus intereses, sus inquietudes ni sus ambiciones", señala el corresponsal de RT Gonzalo Wancha, que diariamente brinda información desde Ucrania.
"Es un periodismo de conflicto, y el hecho de que algunos medios omitan e ignoren los intereses de un lado de la población no hace que esta deje de existir", dice Wancha. Además subraya que "la manipulación que ofrecen las redes sociales es continua". "Hay mucho ruido mediático que no tiene nada que ver con la realidad", dijo.
Visión subjetiva de algunos medios hispanos
No solo los medios anglosajones han omitido, intencionadamente o no, los datos sobre la tragedia que tuvo lugar en Odesa el 2 de mayo. También algunos medios latinoamericanos y españoles han obviado ciertos detalles que son importantes, como, por ejemplo, quiénes fueron los responsables de las llamas.
Así, en el periódico español 'ABC' no se cita de quién es la responsabilidad de las muertes en Odesa y no dice que se lanzaron cócteles molotov contra la Casa de los Sindicatos. En el artículo de Infobae.com sobre el incidente tampoco se esgrime quién fue el culpable. 'El País', a su vez, no detalla cómo fue provocado y quién está detrás del incendio. 'La Razón', aunque escribe que hubo disturbios, no cita que se trató de un grotesco ataque contra esa casa sindical, durante el cual algunas personas llegaron a saltar desde las ventanas del edificio porque no querían morir calcinadas por las llamas provocadas por los radicales.